“Por igual, observa Elémire Zolla, el santo y el animal no comentan, no juzgan. Negaciones que afirman, afirmaciones que niegan. Un sí que nos pierde, un no que nos encuentra”.
Atractor extraño
“Vuelven a tocarse dos líneas paralelas antes drásticamente separadas: metafísica y física, materia y espíritu, cuerpo y mente, cielo y tierra, ondas y partículas. Alguna tesis postula que tales cambios son morfogenéticos y trastornan al máximo lo habitual”.
